El destacado rendimiento del mercado en el cuarto trimestre no salvó el descenso de 2022, uno de los peores en más de dos décadas. Foto archivo
El destacado rendimiento del mercado en el cuarto trimestre no salvó el descenso de 2022, uno de los peores en más de dos décadas. Foto archivo

30 de dic. (Axis negocios) -- Las emisoras mexicanas que conforman el índice referente de los mercados mexicanos cerraron 2022 con un rebote que rompió con la mala inercia de los dos trimestres previos, sin embargo, no logró compensar las minusvalías porque en el ambiente hay incertidumbre por la magnitud que tendrá la desaceleración en una economía mundial que está muy al pendiente de los pasos y los tiempos que tomarán los bancos centrales del mundo en sus decisiones de política monetaria.

     S&P/BMV IPC, el indicador que agrupa a las 35 empresas más grandes y bursátiles de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), cerró el cuarto trimestre de 2022 con una subida de 8.6%, para terminar con su mejor desempeño desde que las bolsas también cerraron fuerte 2020 tras los dos trimestres más duros para la economía a raíz de la pandemia de covid-19.

     De no ser por el buen desempeño del segundo y el cuarto trimestre de 2020, entonces el índice más seguido del mercado mexicano habría terminado con su mejor desempeño desde el cuarto trimestre de 2010.

     Por un lado, la inflación no ha cedido y los bancos centrales no se han ajustado al discurso conciliador y menos agresivo que esperaba el mercado, por lo que las especulaciones sobre la cercanía y magnitud de la siguiente recesión no desaparecerá de la hoja de riesgos.

     Sin embargo, el mercado mexicano ya estaba en un contexto de baja valuación, a lo que se sumó un resiliente desempeño de las emisoras, que han superado con sus resultados financieros las expectativas de expertos en ocho de los últimos 10 trimestres, para abrir la puerta a compras de oportunidad.

     A ello se agregaron indicadores económicos positivos, como el desempeño productivo del tercer trimestre, el continuo avance de las remesas, una desacelerada inversión extranjera directa que aún así podría marcar récord en el año, o el resistente consumo privado, que aunque probablemente no cambiaron sustancialmente la visión fundamental de los inversionistas, la mejoraron un poco.

     Claro que las cadenas de suministro apenas están recuperando rumbo, la guerra entre Ucrania y Rusia no ha dado señales de estar cerca de concluir, la inflación sigue en máximos de décadas y la pandemia está volviendo a ganar titulares ante la relajación de medidas en China y lo que ello representa para el comercio mundial.

     Por esa razón el rendimiento sobresaliente del cuarto trimestre no fue suficiente para rescatar un 2022 de minusvalías, donde el S&P/BMV IPC retrocedió 9% para su tercer peor rendimiento en 22 años, solamente detrás del año electoral 2018, a raíz del nerviosismo que generó el triunfo electoral del presidente Andrés Manuel López Obrador, así como del año de explosión de la crisis financiera estadounidense en 2008.

     En cuanto a la Bolsa Institucional de Valores (Biva), su principal índice, el FTSE Biva, presentó un alza trimestral de 8.7% y un retroceso para todo el año de 8.1%, el segundo peor año de su historia, tomando en cuenta que vio la luz a mediados de 2018.

     Las bajas sucedieron en un contexto de mayor nerviosismo para el mercado estadounidense, cuyos principales índices, el Dow Jones, Nasdaq Composite y S&P 500 presentaron su peor rendimiento anual desde 2008.

     De las 35 compañías del principal índice --excluyendo la recientemente listada Sitios Latinoamérica--, 32 presentaron rendimiento positivo de octubre a diciembre, mientras que las otras tres redujeron su precio. Para el año completo el saldo fue de 15 alzas por 20 descensos.

     Durante el último cuarto del año el mejor desempeño fue mostrado por las compañías pertenecientes al sector consumo y al financiero, que ocuparon siete de los 10 lugares con los mejores avances.

     Ambas industrias comparten la característica de ser cíclicas, o apegadas al desempeño económico, sin grandes crecimientos pero con estabilidad de ingresos y márgenes, a las que suelen acudir los portafolios en panoramas adversos.

     La firma líder del trimestre fue la productora de maíz y tortillas Gruma, con un avance de 35%, pese a que lo largo del año a batallado para asimilar los mayores precios de insumos.

     La compañía, que tiene en Norteamérica su principal mercado, efectuó varias acciones para mejorar su balance en el trimestre, como la firma de un crédito revolvente de 100 millones de dólares o la obtención de cuatro mil 500 millones de pesos a través de bonos para refinanciamiento.

     Gruma, que superó en el tercer trimestre los resultados anticipados por los analistas, además atajó criticas gubernamentales por subir precios al público uniéndose a la estrategia del ejecutivo para tratar de frenar la inflación al congelar precios por un tiempo.

     El segundo lugar fue ocupado por la cadena de tiendas departamentales El Puerto de Liverpool, cuyo valor en bolsa cerró el año 30% por encima de lo registrado al cierre de septiembre.

     La compañía, que recientemente realizó una inversión en el capital de la estadounidense Nordstrom, reportó también resultados del tercer trimestre que sorprendieron positivamente al consenso.

     Parte del impulso a la empresa ha venido de la fortaleza que ha mostrado el consumo en el año, que ha beneficiado a muchas de las compañías del sector.

     Liverpool dio la vuelta con el cuarto trimestre a un año en el que presentaba un desempeño prácticamente plano.

     El podio fue completado por la compañía de servicios de telecomunicaciones Megacable, con una ganancia de 28% solamente durante los últimos tres meses del 2022.

     La compañía continuó durante el trimestre con su plan de inversiones para llegar a cada vez más ciudades en el país, con el objetivo de duplicar su tamaño entre 2025 y 2026.

     Claro que su cotización en bolsa también se vio afectada por las intenciones de su competidor Grupo Televisa de fusionarla con su división de cable mediante un intercambio accionario, transacción que no ha sido acordada pero está en negociaciones.

     Entre las 10 mejores y con rendimientos superiores a 20% de octubre a diciembre también estuvieron los prestamistas Gentera, Regional y Banco del Bajío, así como la comercializadora de productos de consumo Kimberly Clark de México y el conglomerado de consumo Fomento Económico Mexicano.

     El rendimiento de todo 2022 fue totalmente dominado por el sector financiero, con Banbajío, Gentera e Inbursa a la cabeza, ante la perspectiva de que las mayores tasas de interés los seguirá beneficiando, sumado a positivos indicadores actuales de capitalización, liquidez y morosidad.

     Del otro lado de la tabla, las emisoras con el peor rendimiento de octubre a diciembre fueron la firma de telecomunicaciones Grupo Televisa, el conglomerado industrial Alfa y la minorista líder de autoservicios Walmart de México.

     En medio de un positivo trimestre el desempeño de Alfa y la filial de la estadounidense WalMart no fue tan malo, pues retrocedieron 3.2% cada una.

     La que sí destacó fue Televisa, que perdió 19% el último cuarto del año y de hecho también quedó entre las tres peores de todo 2022, con una pérdida de valor de 54%.

     El gigante de la televisión restringida en el país pareció no recibir respaldo de los inversionistas a sus grandes planes, que incluyen la fusión de su sección de cable con Megacable y la separación de Otros Negocios en una empresa separada cotizada en bolsa.

     En el rendimiento del año completo, la compañía fue acompañada entre los peores desempeños por la aerolínea Volaris y la productora de materiales Cemex, ambas con importantes problemas de insumos en medio del panorama inflacionario.

 


Fecha de publicación: 30/12/2022

Etiquetas: Empresas México BMV Biva rendimiento acciones 4T22