AeroMéxico también está obligada a presentar una simple declaración de potencial registro de sus acciones ante la Securities Exchange Comission (SEC, por sus siglas en inglés). Foto Facebook/AeromexicoMX.
AeroMéxico también está obligada a presentar una simple declaración de potencial registro de sus acciones ante la Securities Exchange Comission (SEC, por sus siglas en inglés). Foto Facebook/AeromexicoMX.

10 de jun. (Axis Negocios) -- Grupo AeroMéxico, una de las grandes aerolíneas que salió de la crisis de la pandemia mediante negociaciones bajo la protección de la ley, propondrá a sus dueños abandonar su cotización en el país tras 11 años en el mercado de valores mexicano y a tres meses de concretar la reestructura que convirtió a sus acreedores en accionistas.

     En la reunión a celebrarse el 27 de junio la compañía de aviación, con sede en Ciudad de México, tomará resoluciones al respecto de cancelar la inscripción de las acciones representativas de su capital social ante el Registro Nacional de Valores y consecuentemente en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), dijo a través de un comunicado.

     “Lo anterior, en cumplimiento a las obligaciones expresamente asumidas por la compañía bajo los documentos, de carácter público y fácil acceso, relacionados con su plan conjunto de reestructura y documentos relacionados al mismo, mismo que surtió plenos efectos legales el pasado 17 de marzo del 2022”, escribió la aerolínea en el comunicado.

     Además, como parte del Convenio de Derechos de Registro (RRA, por sus siglas en inglés) del plan de reestructura, AeroMéxico está obligada a presentar una declaración de potencial registro de sus acciones ante la Securities Exchange Comission de Estados Unidos.

     El proceso de cancelación del registro y el listado de los títulos  “es parte de los acuerdos alcanzados por AeroMéxico con sus otrora acreedores e inversionistas, hoy accionistas de la compañía, como parte del RRA”, agregó.

     La compañía concluyó en marzo su proceso de restructura bajo la ley de quiebras estadounidense, iniciado a mediados de 2020 cuando la pandemia causó una crisis al sector aéreo que llevó el volumen de pasajeros a caer más de 80%, y en un momento en que particularmente AeroMéxico ya enfrentaba dificultades por el combustible, la competencia y problemas con sus aeronaves.

     El proceso le permitió hacer frente a deudas por más de tres mil millones de dólares y la dejó con mil 500 millones en la mano para impulsar sus operaciones, lo que implicó cambiar por completo su estructura de capital.

     De esta forma el administrador de fondos de inversión estadounidense Apollo Global Management pasó a ser su principal accionista, la aerolínea estadounidense Delta Airlines conservó una buena participación solo porque inyectó nuevo capital y acreedores reconocidos, como los fondos The Baupost Group, Silver Point Capital, Oaktree Capital Management, pasaron a ser accionistas.

     Si el desliste de la BMV es aprobado en asamblea, AeroMéxico, que debutó en bolsa en 2011 con una oferta pública inicial que superó los 300 millones de dólares, lanzará una oferta pública por las acciones que no están en manos de los principales accionistas, una proporción que no es clara.

     Los 681 millones de acciones que componían el capital de la compañía previo a su reestructura, fueron diluidas prácticamente a cero, por lo que el capital en libre flotación --si es que no aceptaron vender sus acciones por un centavo de peso--sufrió el mismo destino.

     Por otro lado, la nueva estructura accionaria quedó en manos, además de Apollo y Delta (inyección de capital), principalmente en acreedores reconocidos (pasivos preferenciales y pasivos no garantizados).

     Por ello, era previsible que AeroMéxico recortara drásticamente su bursatilidad o pensara directamente en deslistarse, sin embargo, los intercambios de sus acciones han continuado de manera constante.

     Algunos expertos consideran que los movimientos de los últimos dos meses podrían tener su origen en las acciones que quedaron en manos de antiguos bonistas de corto y largo plazo y que prefirieron no conservar su participación como accionistas.

     Los primeros 20 días de operación de las nuevas acciones de la aerolínea, que abrieron intercambios en 390 pesos, promediaron un volumen de 54 mil 700 títulos, mientras que los últimos 20 días ese promedio fue de siete mil 650, con un precio que además ha caído 40% a 232 pesos.

     Esos volúmenes son inferiores al 0.05% del total de sus acciones, que se compara con su promedio histórico de 0.11% o el de otras aerolíneas como Volaris de 0.14% para el último año, sin embargo, algunos pensaban que la compañía seguiría cotizando e incluso casas de bolsa como Monex y Actinver no retiraron su cobertura de la emisora luego de la reestructura.    

     La noticia no representa un impacto negativo para los fundamentales de la compañia, destacaron Brian Rodríguez y Roberto Solano, expertos de Monex Casa de Bolsa, quienes quedaron a la expectativa de conocer el precio de la oferta por las acciones.

     De cualquier manera, AeroMéxico se unirá a la ola de huidas del mercado de valores que ha sumado constantemente nombres los últimos años, como las productoras de materiales para la construcción Elementia Materiales y Fortaleza Materiales, la comercializadora de productos avícolas Bachoco o la líder en lácteos Grupo Lala.

 

 

 


Fecha de publicación: 10/06/2022

Etiquetas: AeroMéxico asamblea desliste BMV acciones accionistas aerolineas