Vitol, uno de los mayores comercializadores de la industria energética a nivel mundial, reconoció ante las autoridades de Estados Unidos haber pagado sobornos a funcionarios públicos en Brasil, México y Ecuador.

El esquema de corrupción en México habría estado vigente desde 2015 hasta julio de este año e involucró a directivos de una subsidiaria de Petróleos Mexicanos, la petrolera estatal.

Estas conductas irregulares ya le costó a Vitol 164 millones de dólares en Estados Unidos, pero aún no es claro qué implicaciones esto podría generar en México, cuyo presidente Andrés Manuel López Obrador ha hecho del combate a la corrupción una de sus principales banderas de gobierno.
 

Grandes empresas y marcas han tenido en el comercio electrónico una opción para seguir manteniendo sus ventas a pesar de las restricciones generadas por la pandemia. A pesar de ello, se han topado con retos logísticos para entregar con la rapidez que sus clientes esperan obtener sus productos directamente en casa.

Cargamos, una startup que inició operaciones el año pasado, busca atender esta necesidad mediante la conversión y gestión de espacios que actualmente no están siendo utilizados, como centros comerciales, estacionamientos y bodegas, para convertirlos en centros de distribución dentro de las zonas urbanas; donde otras empresas de delivery asociadas puedan surtir y entregar rápidamente a los compradores.

En tan solo un año de operación la compañía ha podido sumar varios millones de dólares en ingresos, lo que ha atraído a inversionistas que recientemente realizaron una inversión semilla en la empresa, que sintieron se parecía más a una recaudación serie A.
 

El peso mexicano ha logrado lo que pocos habían estimado con un avance semana como no se veía en dos meses.

Esta semana los mercados financieros estuvieron de fiesta, a la cual las monedas emergentes se unieron aprovechando la debilidad de un dólar que atenuó sus caídas, pero no lo suficiente para limitar el avance del peso.

Así también el peso alcanzó por cuarta ocasión en esta semana su mejor nivel en nueve meses, es decir, desde antes del inicio de la declaración de la pandemia, y, aunque ha recortado significativamente la depreciación en lo que va del año, sigue siendo la mayor desde 2016, cuando el peso perdió más de 20%.

El avance del peso, como de otras monedas emergentes nació de la esperanza de que pronto esté disponible una vacuna efectiva en el mercado y la posibilidad de que se llegue a un acuerdo entre demócratas y republicanos sobre un paquete de estímulos fiscales en Estados Unidos.
 

La bolsa neoyorquina ha logrado extender el rally de noviembre, pues se espera que en el corto plazo se dé luz verde al siguiente tramo de ayuda financiera para soportar el impacto económico provocado por la pandemia.

De hecho, los malos datos de empleo solo fueron un aliciente más para comenzar a sopesar que los legisladores estadounidenses deben de apretar el acelerador en el acuerdo y evitar que la economía siga perdiendo vapor.

Ahora, los inversionistas se regocijan de un escenario altamente complaciente, donde el estímulo económico podría dar mayor apoyo en lo que se comienza a distribuir masivamente alguna de las vacunas contra covid-19.

La duda es, ¿cuánto tiempo durará esto?
 

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Fernanda Celis
Directora Editorial Newsletter AXIS
Especialista en Negocios y Finanzas.