Parece que las elecciones del dirigente del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), una de las agrupaciones laborales más poderosa de México, podría complicarse, a pesar de las altas expectativas del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador para tener un proceso transparente.

Miguel Arturo Flores Contreras, dirigente del movimiento opositor, Petroleros Activos en Evolución (PAE), acusó de que en un proceso previo a esa elección ya hubo irregularidades. Su señalamiento lo hizo en torno a las primeras 12 elecciones que llevó a cabo recientemente el sindicato para elegir a 36 secretarios generales seccionales.

De acuerdo con PAE, el proceso, desde la convocatoria, “estuvo manipulado por las actuales dirigencias seccionales, vinculadas con Carlos Romero Deschamps, anterior secretario general del STPRM”.

Esas elecciones y la que tendrá lugar el próximo año en torno al secretario general suceden después de que Romero Deschamps renunció en 2019 a la dirigencia del sindicato petrolero, tras 26 años al frente, para posteriormente, en marzo de 2021, dejar de ser trabajador activo de Pemex, por “voluntad propia” y exhorto del actual gobierno. 

Las acusaciones de PAE son contrarias a lo esperado hasta ahora por la actual administración, en cuanto a que los procesos de selección interna por la dirección del STPRM sean libres, directos y en secreto.

Si bien no es claro si los señalamientos de PAE están respaldados con pruebas, el hecho que se comience ya a hablar de irregularidades podría ensombrecer la elección del dirigente sindical petrolero programada para inicios de 2022 y en la que ha trabajado fuertemente la Secretaría del Trabajo y Previsión Social para aparentemente asegurar un proceso limpio y democrático.
 

Que no, que sí pagaría el daño que causó a la empresa petrolera estatal, Petróleos Mexicano. El caso es que varios medios de comunicación reportaron que el presidente del consejo de administración de Altos Hornos de México, Alonso Ancira, finalmente decidió ceder y pagar parte del sobreprecio al que supuestamente vendió la empresa productora de fertilizantes, Agro Nitrogenados, a Pemex durante el gobierno anterior.

El monto del pago fue, de acuerdo con el diario Reforma, entre otros, de 50 millones de dólares, o casi una cuarta parte de los 216 millones que Ancira se comprometió a pagar por esa transacción y que ha sido criticada por el presidente, Andrés Manuel López Obrador.

Ancira al parecer explicó durante una audiencia en el Centro de Justicia del Penal Federal del Reclusorio Norte, que estaba dispuesto a cumplir con lo acordado ya que no quería perder el control que tiene sobre Ahmsa, como mejor se conoce a Altos Hornos.

Ancira así entró al parecer en sus cabales ya que su aparente presunción de no desear pagar lo que había acordado con el gobierno generó una reacción firme del presidente López Obrador, en el sentido de que si no pagaba, una idea con la que estaba comenzando a coquetear el empresario, conocido por cierta altanería, las autoridades reabrirían la investigación penal en su contra y que, de hecho, lo llevó a la cárcel por algunas semanas antes este año. Además de que en caso de que regresara a prisión tendría problemas para pelear la disputa que sostiene con Grupo Villacero por el control de Ahmsa.
 

La industria que al menos en América Latina más atrajo la atención de los fondos de capital de riesgo en la última década fue. . . la enfocada en la comida.

Cerca de 323 startups latinoamericanas que participan en la elaboración, distribución y otros procesos de la industria alimenticia obtuvieron 64% del total de ese tipo de recursos a lo largo de la última década, convirtiendo al sector, mejor conocido como FoodTech, en el ganador en esa zona geográfica.

La cantidad de fondos que esas poco más de tres centenas de firmas pudieron recabar en los últimos 10 años sumó la cantidad de mil 700 millones de dólares, de acuerdo con un estudio de Endeavor, comunidad mundial de emprendedores de alto impacto, y la empresa de alimentos y bebidas PepsiCo.

Todas esas nuevas compañías están, en síntesis, reinventando la forma en que los consumidores adquieren y consumen sus alimentos, desde su elaboración, hasta sus empaques, pasando por la transportación, logística, comercialización y distribución.

Las empresas que están levantando esos capitales están sencillamente transformando cada eslabón de esa cadena de producción y consumo. Actualmente, las startups de FoodTech en América Latina ya generan al menos 29 mil empleos directos.
 

Bitso, la plataforma de intercambio de criptomonedas más grande de América Latina, no se anda por las ramas en materia de innovación. El también unicornio mexicano anunció que permitirá a los trabajadores del país residentes en el extranjero mandar sus transferencias a sus familiares en, nada más ni nada menos, que criptomonedas.

No es claro aún que tanto esos trabajadores migrantes mexicanos tomen la oferta de Bitso, pero lo que sí es claro es que la plataforma ofrecerá, a través de este nuevo mecanismo, la seguridad que ofrecen las monedas digitales, además de cierta estabilidad por convertir esas transferencias, mejor conocidas como remesas, en una criptomoneda estable y con pocas variaciones, como es la llamada USDC o stablecoin, que está respaldada por el precio del dólar.

La propuesta, independiente de su éxito o no, llega además en un buen momento. Justo cuando las remesas están a punto de romper, por octavo año seguido, un monto récord anual en México. Los especialistas estiman que esos envíos podrían llegar a sumar cerca de 50 mil millones de dólares, una cantidad inesperada y que nadie previó para este año, más cuando en 2020 esas remesas sumaron la cantidad histórica de poco más de 40 mil 600 millones.

Bitso ofrecerá su nueva opción en materia de envío de recursos desde el extranjero a México a través del nuevo servicio Bitso Shift, que es una billetera electrónica en la que los usuarios pueden depositar fondos en pesos mexicanos o dólares estadounidenses, y realizar retiros en México a través del sistema de pagos electrónicos interbancarios (SPEI).

Bitso ofrecerá Bitso Shift de la mano de la empresa de tecnología financiera Circle.

Un detalle importante que Bitso deberá aclarar más tarde, sobre todo a las autoridades financieras, es cómo evitará y blindará esta nueva oferta de transferencias de procedencia dudosa y que podrían constituir lavado de dinero.
 

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Fernanda Celis
Directora Editorial Newsletter AXIS
Especialista en Negocios y Finanzas.