Los cambios, que entraron en vigor el 25 de marzo, generarán beneficios para los operadores aéreos nacionales e internacionales, como rutas más precisas, un aumento en la capacidad del espacio aéreo y una reducción promedio de 11 minutos en las demoras presentadas por vuelo. Foto archivo
Los cambios, que entraron en vigor el 25 de marzo, generarán beneficios para los operadores aéreos nacionales e internacionales, como rutas más precisas, un aumento en la capacidad del espacio aéreo y una reducción promedio de 11 minutos en las demoras presentadas por vuelo. Foto archivo

26 de abr. (Sentido Común) -- Las principales aerolíneas comerciales del país y las organizaciones que representan los intereses del sector, dieron su respaldo a los cambios implementados por la administración federal al espacio aéreo del Valle de México --de cara a la entrada en operación del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles-- y que desde su aplicación han sido objeto de dudas sobre su eficiencia y seguridad.

     Los cambios, que entraron en vigor el 25 de marzo, generarán beneficios para los operadores aéreos nacionales e internacionales, como rutas más precisas, un aumento en la capacidad del espacio aéreo y una reducción promedio de 11 minutos en las demoras presentadas por vuelo, destacaron autoridades aéreas en una conferencia en la que estuvieron acompañadas de representantes del sector.

     “Tenemos un alto nivel de satisfacción; es un proyecto que requiere un constante proceso de mejora y estamos en eso”, dijo Luis Noriega Benet, presidente de la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero), durante su intervención. Evidentemente para los miembros de la cámara, las aerolíneas y prestadores de servicio, la prioridad numero uno es la seguridad”.

     Gobierno y aerolíneas mostraron unidad a favor del nuevo sistema a una semana de que José Alfredo Covarrubias, secretario general del Sindicato Nacional de Controladores de Tránsito Aéreos, hiciera pública en una entrevista con El Financiero una potencial colisión entre dos aviones, así como al reporte en redes sociales de otros supuestos incidentes.

     En aquella ocasión, tanto SCT como las dos principales líneas aéreas del país, se pronunciaron públicamente por separado a favor del nuevo sistema y negaron de conocer el incidente comentado por el representante sindical..

     “Por nuestra parte, los operadores internacionales representados por nosotros, que son más de 58, no hemos recibido un reporte de alguna situación crítica que haya representado un riesgo para la operación”, dijo en la conferencia Cuitláhuac Gutiérrez, representante en México de International Air Transport Association (IATA), el organismo que representa a las aerolíneas que generan más de 80% del tráfico aéreo mundial.

     Esta postura fue respaldada por el representante de Grupo AeroMéxico, quien apuntó que desde su implementación y hasta la fecha, los datos arrojan eficiencias y seguridad.

     Adicional a la cuestión de seguridad los otros dos puntos más controversiales del rediseño fueron la molestia de habitantes de Ciudad de México del sur y del poniente, tras comenzaron a experimentar el ruido de los aviones. Al mismo tiempo que el gobierno aseguraba que habría ahorro de combustible y por lo tanto menos gasto de este insumo por las propias aerolíneas, así como menos contaminación, un reporte del Colegio de Pilotos decía lo contrario.

     “En el perfil de ascenso las restricciones de altitud llevan a descontinuar los ascensos y tener que nivelar la aeronave con el consecuente aumento en el gasto de combustible y emisiones de dióxido de carbono”, indicó el Colegio de Pilotos respecto a las salidas desde el Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (AICM).

     No obstante, las aerolíneas de bajo costo, Volaris y Viva Aerobus, destacaron que el rediseño del espacio aéreo les ha permitido aprovechar de una mejor manera la tecnología y rendimiento de sus flotas, compuestas en ambos casos por aviones del fabricante europeo Airbus, además de hacer más eficientes sus aterrizajes y despegues.

     José Luis Suárez, vicepresidente ejecutivo de operaciones de Volaris, incluso destacó que en caso de su empresa, los beneficios del cambio en el espacio aéreo son ya palpable.

     “Hemos visto ahorros de combustible de alrededor de los 40 kilos comparando origen y destino, lo cual representa un ahorro importante no solo económico sino también ambiental, porque esto representa menos contaminación al llegar a Ciudad de México”, aseguró durante la conferencia.

     Claro que, como todo cambio, el nuevo diseño del espacio aéreo no está exento de fallos, como el ocurrido un día después de su implementación, entre un avión de Viva Aerobus con destino a Oaxaca y un jet ejecutivo privado, y que por instrucciones no coordinadas por parte de los controladores aéreos, estuvieron involucrados en un cruce con mil pies de altura de diferencia, el mínimo establecido.

     Pese a ello, Carlos Antonio Rodríguez Munguía, director de la Agencia Federal de Aeronáutica Civil (AFAC), consideró que “realmente no hubo ninguna situación crítica”, al tiempo que recordó que las autoridades únicamente pueden investigar un incidente si es reportado por los pilotos o comandantes, quienes deben hacerlo en un lapso de 48 horas.

 


Fecha de publicación: 26/04/2021

Etiquetas: Aerolíneas vuelos cambios espacio aéreo ciudadanos Ciudad de México AICM