Ingresos minoristas en México decepcionan en enero al registrar caídas

21 de mar. (Axis negocios) -- Las ventas de los comercios minoristas en México cayeron en enero, dando señales de un consumo, hasta ahora un pilar del crecimiento económico, con tendencia decreciente en los últimos meses.

     Las empresas al por menor registraron una caída de 0.6% mensual en sus ingresos durante el primer mes de 2024 en comparación con las ventas del mes de diciembre, para su tercer descenso consecutivo, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía. Además, fue la baja más pronunciada para un primer mes desde 2017, cuando el indicador disminuyó 1.3%.

     “Las ventas de las empresas comerciales al por menor muestran una tendencia decreciente desde el último trimestre de 2023, aunque menos pronunciada que en el segmento al por mayor”, escribió Julio Santaella, economista y expresidente de Inegi, en su cuenta de X.

     En su comparación anual, los ingresos por ventas al menudeo cayeron 0.8% frente al arranque de 2023 en cifras sin ajuste estacional, por lo que ligaron dos meses a la baja después de mantenerse en expansión durante los 33 meses previos.

     Además, el desempeño del comercio minorista contrastó con las expectativas de los analistas encuestados por Infosel, quienes anticipaban un crecimiento mensual de 0.3% y un avance anual de 1.1%.

     Para los economistas, la debilidad de las ventas se explica en parte por factores estacionales, pero también por una inflación que pesó sobre el poder adquisitivo de las personas, ya que en enero aceleró por tercer mes consecutivo hasta una tasa anual de 4.88%, presionada por los productos cuyo precio es más volátil.

     “El resultado es negativo, extendiendo una racha de debilidad probablemente afectada por un efecto estacional desfavorable, con la ‘cuesta de enero’ pesando en el gasto de las familias”, dijeron Juan Carlos Alderete y otros expertos de Banorte, en un reporte.

     Las presiones estacionales e inflacionarias provocaron retrocesos en cinco de los nueve componentes del indicador, sobre todo artículos de oficina y esparcimiento (-12.9%); ropa y calzado (-6.6%) y ventas por internet (-6.1%). Por su parte, las ventas de tiendas departamentales y autos (ambas con un alza mensual de 1.5%) compensaron un poco el impacto de estas caídas.

     Los expertos prevén que, pese a las señales negativas, el consumo privado --que alcanzó máximos históricos a lo largo de 2023-- podría acelerarse en los próximos meses, beneficiado sobre todo por factores de corto plazo.

     “Existen varios factores de impulso, aunque el más relevante --al menos el próximo par de meses-- será el adelanto de los pagos de los distintos programas sociales para cumplir con las restricciones electorales”, dijeron Alderete y su equipo.

     Así mismo, algunos indicadores apuntan a un mayor dinamismo del consumo en febrero, principalmente las ventas mismas tiendas de la ANTAD, que crecieron 4.6% año a año en términos reales, junto con mejoras salariales significativas y una inflación más moderada en dicho mes.

     Pese a ello, los analistas no están convencidos de que esta inercia sea sostenible, por lo que esperan una desaceleración en la segunda mitad del año.

     “Estimamos que la actividad económica, el empleo y la confianza de los hogares se moderen” después del primer semestre, dijo Ángel Huerta, economista de Ve por Más, en un reporte. “Además, el poder adquisitivo de los hogares seguirá comprometido por los altos niveles de inflación y tasas de interés, no obstante que se espera que ambas variables bajen algo. Finalmente, si el empleo en Estados Unidos se desacelera, el envío de remesas perdería fuerza”.

     Por su parte, los ingresos de los comercios mayoristas bajaron 3.6% mensual en enero y 3.5% a tasa anual original.

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* César Pérez contribuyó a la elaboración de esta historia.