América Móvil cumple 10 años de regulaciones asimétricas sin definición sobre futuro

14 de feb. (Axis negocios) -- América Móvil, el gigante de las telecomunicaciones en América Latina, cumple este año una década de estar bajo las medidas asimétricas impuestas por el regulador del sector de las telecomunicaciones de México, con la posibilidad de cambios en dichas regulaciones que podrían beneficiarlo, o bien, representar mayores restricciones a la que ya posee.

     El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), dará a conocer, en el segundo trimestre de este año, las conclusiones de la tercera revisión anual a las medidas asimétricas aplicadas a la compañía propiedad de la familia Slim, para determinar si emitirá nuevas medidas o modificará las ya impuestas.

     “Con este proyecto se busca que el marco regulatorio asimétrico cumpla con los objetivos para los que se estableció”, dijo el IFT, como se conoce al regulador del sector, en su plan anual de trabajo. “Tales como incentivar una mayor competencia, eliminar barreras a la entrada, fomentar el ingreso de nuevos participantes en el mercado, evitar prácticas anticompetitivas y ofrecer servicios con mejores condiciones de calidad y precio para las personas usuarias”.

      Dicha revisión podría representar algunos beneficios para la empresa, o al menos así lo consideran especialistas de Morgan Stanley, para quienes la revisión supone riesgos moderados debido que las medidas se han visto reflejadas en una reducción en algunos segmentos.

     Ejemplo de ello es el mercado de telefonía e internet fijo, en el que América Móvil participa a través de su filial Teléfonos de México (Telmex), y que pasó de 70% del total de líneas telefónicas fijas a marzo de 2014 --previo a la aplicación de las medidas asimétricas-- a 38.3% al cierre del primer trimestre de 2023, el último dato disponible de IFT.

     Los datos del regulador también apuntan a que en el segmento de internet fijo, la empresa de la familia Slim pasó de poseer 65.9% del mercado total, a 38.5% hasta marzo del año pasado.

     De hecho, hace unos días el propio Carlos Slim, el hombre más acaudalado del país, aseguró que Telmex dejó de ser un negocio rentable y desde hace una década opera en números rojos, debido al pasivo laboral que enfrenta y a las regulaciones asimétricas que le fueron impuestas, y que entre otras cosas le impiden ofrecer a sus clientes el llamado servicio tripleplay, que consiste en internet, telefonía y televisión de paga.

     “Telmex está en números rojos desde hace 10 años. No cobramos dividendo, tiene que estarse alimentando el fondo de pensiones y tenemos perspectivas de que hasta 2040 se aliviarán las finanzas”, dijo en una extensa conferencia de prensa.

     Pese a ello, América Móvil reportó el martes que durante el cuarto trimestre del año sumó 386 mil nuevos accesos de banda ancha, siendo México el mercado que aportó más, con 165 mil accesos. De hecho, en términos anuales los accesos de banda ancha fija fueron la segunda base con un mayor crecimiento para la empresa, con un avance de 4.1% respecto a 2022 y 32 millones de las 74 millones de unidades generadoras de ingresos de línea fija.

     En términos monetarios los ingresos de sus servicios de telecomunicaciones fijas fue el rubro que más incrementó en México, con un alza de 5.7% versus el alza de 4.9% de los ingresos en el país.

     Dicha baja en el mercado de servicios fijos, aunado a la entrada de AT&T a México en 2015 --lo cual ha representado una mejora en cobertura móvil y asequibilidad-- podrían ser factores positivos que considerar por IFT en su evaluación.

     “Si estamos en lo cierto, un resultado positivo de la revisión del IFT podría reducir la incertidumbre regulatoria y ser uno de los dos catalizadores para la recalificación de América Móvil desde mínimos de varios años”, escribió en un reporte Pablo Monsivais, analista de Morgan Stanley.

     Pero el escenario en el segmento de telefonía e internet móvil parece ser distinto, ya que tras la aplicación de las medidas, América Móvil --a través de su filial Telcel-- se mantiene como el jugador preponderante con más de 50% del mercado, con 60.1% para líneas móviles y 65.4% para internet móvil al cierre del primer trimestre de 2023.

     Ante ello, sus competidores y algunas organizaciones, como la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (Canieti), plantearon a IFT la separación estructural de América Móvil y sus filiales, al considerarlo como la “única solución viable” para generar una competencia real.

     “Creemos que la nueva regulación potencial más preocupante es la separación estructural de la red Telcel, algo que toda la industria exigió públicamente al IFT que hiciera cumplir en el proceso de consulta” que finalizó en marzo, escribieron en un reporte Andrés Coello y Leonardo Curtidor, analistas de Scotiabank.

     Además, la resolución de la revisión bienal ocurrirá en medio de la iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador, para desaparecer al IFT y otros órganos autónomos por considerar que son costosos y trabajan al servicio de los intereses de los particulares.

     A las críticas al IFT se sumó el propio Carlos Slim, quien en la conferencia que ofreció cuestionó la autonomía del IFT, primero de gobiernos federales anteriores --específicamente del sexenio de Enrique Peña Nieto, en el que se le impuso la regulación asimétrica-- y posteriormente de sus competidores.

     En específico, el empresario apuntó a Gabriel Contreras, quien fue comisionado presidente del IFT entre 2013 y 2020 y que posteriormente fue nombrado director jurídico de AT&T en México.

     “No se vale”, señaló Slim Helú en la extensa conferencia de prensa que dio hace unos días. “Creo que si va a ser autónomo, que sea autónomo de a deveras”.

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