Exclusiva región mexicana de Costalegre lista para un impulso turístico de mil mdd

21 de dic. (Bloomberg) -- Los desarrolladores que transformaron Mandarina, un lugar virgen en la costa del Pacífico mexicano, de una playa escarpada a un baluarte de viajes de lujo con el octavo mejor hotel del mundo, apuntan más alto con su último proyecto: Xala, un desarrollo de mil millones de dólares en el estado de Jalisco.

     Ubicado en 12.1 kilómetros cuadrados en la región costera de 241 kilómetros de Costalegre, Xala incluirá uno o dos hoteles de alto lujo y alrededor de 100 casas de vacaciones estilo finca, todas al lado de un nuevo aeropuerto internacional construido especialmente para apoyar el desarrollo. El sitio en sí es un mosaico de manglares y esteros a unas 144 kilómetros al sur de Puerto Vallarta y a 128 kilómetros al norte de Manzanillo. El desarrollador Ricardo Santa Cruz, socio gerente de Actur, dijo que unir la tierra requirió que él y sus socios llegaran a 68 acuerdos de propiedad separados durante cuatro años. La visión, dijo, ahora es crear el proyecto de desarrollo de menor densidad que se haya llevado a cabo en México, dijo en una entrevista exclusiva.

     En primer lugar, el Aeropuerto Internacional de Chalacatepec, ya construido como parte de una asociación público-privada pero que aún no está abierto; se encuentra a tan solo 10 minutos de Xala. A mediados de 2024 será capaz de recibir aviones 737 en su pista asfaltada de 2.5 kilómetros. En un inicio, recibirá en su mayoría jets privados y vuelos regionales. El objetivo es mantener las operaciones pequeñas del aeropuerto para que los pasajeros que llegan puedan pasar por la aduana en minutos y pronto se encuentren relajándose en tranquilas playas.

     Desde el punto de vista del turismo de lujo, el proyecto será un hotel Six Senses de 51 villas que se completará en 2026, dijeron los desarrolladores. Cada habitación contará con una piscina privada. Los huéspedes también tendrán acceso a un santuario de tortugas, 32 kilómetros de senderos para ciclismo de montaña y bahías naturales para practicar kayak.

     El costo del proyecto, de mil millones de dólares, lo coloca entre los proyectos turísticos más caros de México en los últimos tiempos; proyectos igualmente ambiciosos y de baja densidad como Kanai en la Riviera Maya de Yucatán han mantenido en privado las cifras de costos. El financiamiento proviene de los principales accionistas de Xala: TPG-Axon Capital, Morgan Stanley, el Fondo de Pensiones del Estado de Jalisco, el Fondo Nacional de Infraestructura de México y algunas personas de alto patrimonio neto aún no reveladas.

El bullicio en Costalegre

Así como la hermana mayor de Xala, Mandarina y su impresionante hotel One&Only, se benefician de la proximidad a Puerto Vallarta y su puñado de resorts de lujo, el nuevo proyecto se beneficiará de la cercanía a algunos destinos amados por el jet set. Alrededor de Xala se encuentran la reserva de la selva convertida en un escondite elegante de Cuixmala, la comunidad de villas Careyes, el complejo tecnicolor Las Alamandas y el Four Seasons Tamarindo de un año de antigüedad, todo en un tramo de costa de 80 kilómetros.

     Entre esas propiedades, Cuixmala puede ser la más conocida. Su fundador, James Goldsmith, recibió a todo el mundo, desde Mick Jagger hasta el recién desaparecido Henry Kissinger y el difunto presidente Ronald y su esposa Nancy. El complejo aún popular entre celebridades como Tom Cruise, Madonna, Cara Delavigne y Gwyneth Paltrow.

     Cuixmala y sus compañeros han hecho de la zona un refugio seguro para los amantes del sol que no quieren sacrificar la privacidad o las comodidades. Esta reputación ha atraído a marcas como Cheval Blanc a buscar sitios para proyectos hoteleros. Sin embargo, pocos se han comprometido a construir, principalmente debido a desafíos logísticos y geográficos.

     A diferencia de Mandarina, que tiene un aeropuerto importante a solo 59 kilómetros de distancia, los centros turísticos en Costalegre actualmente se benefician de poca infraestructura masiva. Llegar a Cuixmala o Four Seasons Tamarindo, por ejemplo, a menudo requiere un viaje de cuatro horas desde el aeropuerto de Puerto Vallarta o un vuelo de 20 minutos en los aviones de hélice que pueden aterrizar en las pistas de Cuixmala y Las Alamandas. (El aeropuerto de Manzanillo está aproximadamente a una hora del Four Seasons, pero recibe muy pocos vuelos).

     “Debido a que no había infraestructura, gran parte de Costalegre se ha conservado”, dijo Santa Cruz. “Para mí, es por eso que tiene el mayor potencial para el turismo sustentable en México.

La visión de Xala

El sitio de Xala es una mezcla única de calas de playa aptas para nadar, océano con rompientes de surf, manglares envueltos en la selva y una cresta montañosa tallada con senderos para bicicletas. De sus 12.1 kilómetros cuadrados, 2.4 se dedicarán a la reforestación y Santa Cruz dijo que su equipo está trabajando en esfuerzos de conversación marina para proteger los arrecifes de la zona.

     El Six Senses aprovechará ese terreno mixto con habitaciones tanto en la playa como a lo largo de la cresta. La propiedad enfatizará los ingredientes de cosecha propia de una granja en el lugar en un “Alchemy Bar”, un espacio exclusivo para la marca de bienestar donde los huéspedes pueden preparar sus propios exfoliantes y mascarillas de belleza; en el restaurante principal, que contará con un mercado de agricultores; y en una escuela de cocina. También se contará con un club de surf y un bar para pies en la arena.

     Con las reservas de hoteles de Six Senses a años vista, el enfoque de Xala hasta ahora ha sido la venta de casas. Santa Cruz dijo que 30 de los 75 Rancho Estates han atraído discretamente compradores a precios desde 5.5 millones de dólares. Se espera que otras 25 residencias hoteleras de marca de Six Senses, a partir de 743 metros cuadrados, tengan un precio de entre ocho y 12 millones de dólares.

     Las casas son un punto importante de diferenciación entre Mandarina y Xala, dijo Santa Cruz. “Vemos esto como un lugar que la gente no solo visitará, sino que también vivirá”, explica, ya que Xala tiene el doble de casas y una fracción de las habitaciones de hotel.

“Estamos muy orgullosos de lo que hicimos en Mandarina, y verla como número uno en América del Norte en el World's 50 Best este año fue gratificante, sin duda”, dijo Jeronimo Bremer, socio gerente de Actur. (One&Only Mandarina ocupó el octavo lugar en la lista global compilada por William Reed Business Media, con sede en el Reino Unido, y ocupó el primer lugar entre las entradas de América del Norte).

     “Ahora, Xala se trata de crear una comunidad residencial única, mientras que Mandarina se trataba de crear un resort de clase mundial”, agregó Bremer.