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24 de ene. (Axis negocios) -- El gobierno de Estados Unidos dijo que los cambios que propuso el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador para paliar un decreto presidencial que prohíbe la importación de maíz transgénico y otros productos a partir de 2024 son insuficientes para resolver las diferencias entre ambas naciones, por lo que advirtió que de ser necesario tomará "medidas formales" para defender sus intereses.
Las acciones que considera la administración estadounidense estarían apegadas al acuerdo comercial entre Estados Unidos, México y Canadá, conocido aquí como T-MEC, para resolver esta disputa.
"Dejamos en claro hoy que si este problema no se resuelve, consideraremos todas las opciones, incluida la adopción de medidas formales para hacer cumplir nuestros derechos en virtud del acuerdo entre Estados Unidos, México y Canadá", dijeron Doug McKalip, el negociador agrícola de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos, y Alexis Taylor, la subsecretaria de Comercio y Asuntos Agrícolas Exteriores del Departamento de Agricultura de ese país, en un comunicado.
Los funcionarios estadounidenses emitieron este posicionamiento tras una nueva ronda de reuniones con sus pares en México, a fin de negociar cambios en el decreto que López Obrador publicó en 2020, el cual suspendería el uso e importación de maíz transgénico y otros productos como el glifosato a partir del 31 de enero de 2024, aunque el país propuso aplazar el veto hasta 2025.
Para el gobierno y los productores estadounidenses, el decreto del mandatario mexicano tiene el potencial de interrumpir sustancialmente el comercio, perjudicar a los agricultores en ambos lados de la frontera e incrementar de manera significativa los costos para los consumidores.
Por ello, a finales de noviembre de 2022, el secretario de Agricultura de Estados Unidos, Tom Vilsack, visitó México para expresar su inconformidad a López Obrador. Al término del encuentro el funcionario publicó un comunicado en el que dijo que no descartaba acudir a tribunales para combatir los vetos.
En seguimiento, una delegación mexicana encabezada por Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) fue enviada en diciembre a la ciudad de Washington, D.C., para atajar dicha disputa.
No obstante, todavía no hay algún acuerdo. Para Estados Unidos la propuesta mexicana todavía “amenaza con interrumpir miles de millones de dólares en el comercio agrícola bilateral, causar un daño económico grave a los agricultores estadounidenses y ganaderos mexicanos, así como reprimir importantes innovaciones necesarias para ayudar a los productores a responder a los desafíos climáticos y de seguridad alimentaria apremiantes”, dijeron McKalip y Taylor en el comunicado.
Previo a estas declaraciones, López Obrador dijo que hay apertura de su administración para llegar a un acuerdo con Estados Unidos sobre su política biotecnológica, aunque tampoco descartó que el tema deba resolverse en un panel de solución de controversias en el marco del T-MEC.
A la par de estos desencuentros por el maíz transgénico, que para sus impulsores es una solución a los problemas de escasez alimentaria y altamente efectivo para reducir el uso de agua y resistir plagas --al tiempo que aseguran no existen estudios con rigor científico que demuestren daños a la salud-- México también busca abaratar el precio del maíz como parte de su lucha en contra de la inflación.
Recientemente la Federación impuso una tasa de 50% a las exportaciones de maíz blanco harinero, el más usado para consumo humano a través de diversos productos como la tortilla, a fin de complementar otras acciones adoptadas por la actual administración para controlar la inflación en alimentos.
Con esa medida, la actual administración busca mantener la producción de maíz en el mercado mexicano, algo que incrementaría la oferta al encarecer esas exportaciones y reducir su atractivo en el exterior. Esto con el fin de que, ante una mayor cantidad de maíz blanco para su venta en México, su precio, en consecuencia, baje y así también frene la inflación de diversos productos elaborados con ese ingrediente como es el caso de la tortilla.
Sin embargo, para analistas del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), el arancel también es incompatible con las obligaciones que México tiene con sus socios comerciales, en materia de prohibiciones y restricciones a la exportación, al tiempo que genera una percepción de falta de compromiso con las obligaciones que el país contrajo en sus 14 tratados de libre comercio --incluido el T-MEC-- y ante la Organización Mundial del Comercio.
*Emiliano González contribuyó con la elaboración de esta historia.
Fecha de publicación: 24/01/2023
Etiquetas: maíz transgénico importaciones decreto AMLO agricultura TMEC